En las últimas décadas, el rápido crecimiento de las ciudades ha dado lugar a una serie de desafíos ambientales y sociales a escala urbana. La disminución de espacios verdes y la falta de áreas permeables son algunos de los problemas que afectan la calidad de vida de sus habitantes. En este contexto, las cubiertas verdes son una solución innovadora y eficaz para promover prácticas más sostenibles en la construcción y el uso de edificios en las áreas urbanas.
Beneficios de las cubiertas verdes
Las cubiertas verdes han demostrado ser una herramienta eficaz para mejorar el desarrollo urbano sostenible. Estas estructuras, también conocidas como green roofs o cubiertas vegetales, consisten en una capa de plantas que crecen en la superficie del techo de edificios. Esta opción, cada vez más popular, presenta unos beneficios ambientales a escala urbana, así como para los ocupantes de estos edificios.
Beneficios urbanísticos
- Mejora de la calidad del aire: Las cubiertas verdes actúan como sumideros de carbono, absorbiendo los gases contaminantes y las partículas en suspensión presentes en el aire.
- Aumento de la biodiversidad: Las cubiertas verdes proporcionan hábitats para una gran variedad de especies vegetales y animales, lo que contribuye a la diversidad biológica en las zonas urbanas.
- Retención de agua de lluvia: Las cubiertas verdes ayudan a retener el agua de lluvia, reduciendo la escorrentía y mejorando la calidad del agua. Una parte del agua absorbida se evapora, mientras que el resto es conducido al sistema de aguas residuales.
- Reducción del efecto isla de calor: Las cubiertas verdes ayudan a reducir la temperatura del aire y la radiación solar en las zonas urbanas, lo que disminuye este efecto.
Beneficios individuales
- Reducción del consumo de energía: Las cubiertas verdes pueden ayudar a reducir el consumo de energía en climatización y ventilación, ya que actúan como reguladores de la temperatura y la humedad en los edificios.
- Aumento de la vida útil de la cubierta: Las cubiertas verdes protegen los materiales del techo de las influencias externas como el sol, la lluvia, el viento o los cambios de temperatura.
- Bienestar de los ocupantes: Vivir o trabajar en un entorno verde impacta positivamente en el bienestar de las personas, ayudando incluso a prevenir problemas de salud.
Certificaciones sostenibles y las cubiertas verdes
Además de los beneficios urbanos y individuales, el uso de cubiertas verdes también puede contribuir a la puntuación final para la obtención de certificaciones sostenibles como BREEAM, LEED, WELL, VERDE Y DGNB.
En la metodología BREEAM, la instalación de una cubierta verde puede tener impacto en los siguientes requisitos de las categorías "Uso del suelo y ecología" y "Agua":
- Mejora de la ecología del emplazamiento (USE 4): en este requisito se deben proponer una serie de mejoras relacionadas con la biodiversidad del edificio, pudiendo ser la instalación de una cubierta verde una de ellas.
- Impacto a largo plazo sobre la biodiversidad (USE 5): una cubierta verde proporciona nuevos hábitats para especies vegetales y animales que perduran al largo de los años, por lo que puede beneficiarnos en la obtención de este requisito BREEAM.
- Equipos eficientes en cuanto a consumo de agua (AG 4): la presencia de plantas autóctonas y de bajo consumo hídrico en una cubierta verde pueden ayudar en la obtención de este requisito BREEAM.
En el caso de la certificación sostenible LEED, la instalación de cubiertas verdes puede afectar a tres créditos de la categoría “parcelas sostenibles” (sustainable sites):
- Site Development – Protect or Restore Habitat: este crédito LEED determina que un 30% de la superficie de la parcela debe contener vegetación autóctona o adaptada. En el caso de edificios urbanos, la instalación de una cubierta verde es la opción idónea para conseguir este punto.
- Open Space: este crédito LEED determina que un 30% de la superficie de la parcela debe ser un espacio abierto para que sus usuarios tengan conexión con el exterior, del cual un 25% debe ser vegetal. De nuevo, la instalación de cubiertas verdes es normalmente usada en edificios urbanos para lograr este crédito.
- Heat Island Reduction: se deben usar estrategias para minimizar el efecto isla de valor tanto a nivel de cubierta como de urbanización. En el caso de las cubiertas, una de las opciones para cumplir con este crédito es el uso de cubiertas verdes, aunque también se puede optar por hacer uso de acabados de muy alta reflexión solar.
Para el resto de certificaciones sostenibles como WELL, VERDE y DGNB, los beneficios para la obtención de puntos en las diferentes categorías son similares a los descritos. Por lo tanto, la elección de instalar una cubierta verde en un edificio puede ayudarnos significativamente con el proceso de certificación.
Tipos de cubiertas verdes
Existen tres tipos principales de cubiertas verdes: extensivas, intensivas y semi-intensivas. Cada uno de estos tipos varía en términos de profundidad del sustrato, selección de plantas, uso y mantenimiento.
Cubiertas verdes extensivas
Consisten en una capa de sustrato poco profundo, de entre 2 y 15 centímetros, con plantas como musgos, sedum y gramíneas. Estas cubiertas verdes son muy ligeras y requieren muy poco mantenimiento, pudiendo incluso prescindir de riego. Estas características las convierten en la opción más económica y común.
Cubiertas verdes intensivas
También conocidas como cubiertas ajardinadas, son más profundas que las extensivas, con un sustrato a partir de 15 centímetros. Pueden albergar una variedad de plantas ilimitada, incluyendo árboles y arbustos. Estas cubiertas verdes son más pesadas y requieren un mayor mantenimiento, como riego, fertilización y poda, por lo que se convierten en el tipo de cubierta verde que alberga más costes.
Cubiertas verdes semi-intensivas
Son una opción intermedia entre las cubiertas verdes extensivas e intensivas, mezclando estas dos tipologías. Con un sustrato de entre 15 y 45 centímetros, se siembran plantas como sedum en los grosores más pequeños, mientras que en las partes más profundas se siembran arbustos o árboles. Estas cubiertas verdes requieren un mantenimiento moderado, incluyendo riego periódico.
En conclusión, las cubiertas verdes son una solución sostenible que aporta una serie de beneficios tanto al entorno urbano como a los ocupantes de los edificios. Aunque su diseño y construcción requiere de un esfuerzo adicional, los beneficios a largo plazo son significativos, por lo que consisten en una excelente opción a aplicar. Además de sus beneficios a escala urbana e individual, ayudan a la obtención de puntos en la obtención de certificaciones sostenibles.
