El efecto isla de calor urbana es una realidad cada vez más preocupante, resultado de la construcción no sostenible y del desarrollo masivo de las ciudades sin considerar aspectos ambientales. Por esta razón, certificaciones sostenibles como LEED o VERDE incluyen la reducción de este sobrecalentamiento con créditos dedicados a ello.
En este artículo, exploramos en qué consiste este efecto, cómo reducirlo y cómo justificar estas acciones para obtener los créditos correspondientes en certificaciones sostenibles, además de presentar un caso práctico de aplicación de medidas sostenibles.
¿Qué es el efecto isla de calor?
El efecto isla de calor es el calentamiento excesivo que ocurre en la superficie de una ciudad. Este fenómeno se basa en el aumento de temperatura debido al reflejo del sol en materiales de construcción como el asfalto. En otras palabras, las ciudades, desarrolladas con materiales de baja reflectancia, retienen el calor, lo que provoca un sobrecalentamiento del entorno urbano.
Este efecto es exacerbado por varias prácticas urbanísticas comunes:
- Alta densidad de edificios: Las áreas urbanas con una alta concentración de edificios tienen menos espacio para la vegetación, lo que reduce la cantidad de sombra, factor crucial para enfriar el ambiente.
- Superficies impermeables: Calles, aceras y techos están típicamente hechos de materiales impermeables que absorben y retienen calor. Estas superficies impiden la absorción de agua en el suelo, lo que podría ayudar a enfriar el ambiente mediante la evaporación.
- Escasa vegetación: La falta de áreas verdes y vegetación en general contribuye a la elevación de temperatura.
En resumen, el diseño y desarrollo urbano desempeñan un papel fundamental en la creación y magnificación del efecto isla de calor. Abordar estos problemas mediante estrategias de urbanismo sostenible es esencial para mitigar el impacto del calentamiento urbano.
Efecto Isla de calor en la ciudad de Barcelona. Fuente: National Geographic
Estrategias de reducción de la isla de calor urbana
Existen diversas estrategias para reducir el efecto isla de calor, que varían según se apliquen en partes de los edificios o en zonas abiertas.
En los edificios:
- Materiales de alta reflexión solar: Utilizar materiales con alta reflectancia solar, especialmente en las cubiertas de los edificios. Un ejemplo es el uso de pinturas o láminas con un Índice de Reflectancia Solar (SRI) alto. El valor de referencia para una cubierta es un SRI de 82. Estos materiales, al ser más claros, reflejan mejor los rayos solares, reduciendo así la acumulación de calor en los edificios.
- Cubiertas verdes: Además de las cubiertas reflectantes, las cubiertas verdes también son una excelente opción. Estas no solo ayudan a reducir el efecto isla de calor, sino que también aportan beneficios adicionales, como la mejora de la biodiversidad y la retención de agua de lluvia.
- Opciones vegetadas en zonas bajas: En áreas más bajas y de paso, donde no es viable el uso de materiales reflectantes debido al riesgo de deslumbramiento, es preferible optar por soluciones vegetadas que añadan frescura al ambiente, como jardines verticales o superficies cubiertas de plantas.
En espacios abiertos:
- Generación de sombra: Crear sombra en espacios abiertos, como aparcamientos, mediante la plantación de árboles o la instalación de estructuras de sombra como marquesinas. La vegetación no solo proporciona sombra, sino que también mejora la calidad del aire y la estética urbana.
- Selección de pavimentos: Elegir materiales adecuados para el pavimento en espacios abiertos. Por ejemplo, el uso de hormigón claro que refleje la luz solar o pavimento drenante (pavicésped) que permite la disipación del calor y mejora el drenaje pluvial.
¿Cómo abordan las certificaciones sostenibles el efecto isla de calor?
Certificación LEED
La Certificación LEED incluye el crédito "Heat Island Reduction" (Reducción de Isla de Calor), que busca minimizar sus efectos sobre microclimas y hábitats humanos y de vida silvestre. Este crédito se puede obtener a través de dos opciones:
Opción 1: Estrategias para cubiertas y superficies no techadas
Este crédito permite obtener 2 puntos, menos en proyectos de atención sanitaria, que obtienen 1.
Para la obtención de esta opción, se deben aplicar una serie de medidas sostenibles a la superficie de cubiertas y superficies no techadas del edificio. Varias de estas medidas ya las hemos visto en el punto anterior.
Medidas en cubiertas:
- Materiales de alta reflectancia: Usar materiales de techo con un Índice de Reflectancia Solar (SRI) mínimo según la pendiente del techo.
- Cubierta vegetada
Medidas en superficies no techadas:
- Vegetación: Usar plantas que proporcionen sombra sobre áreas pavimentadas.
- Estructuras de generación de energía: Proveer sombra con estructuras cubiertas por sistemas de energía como paneles solares.
- Dispositivos arquitectónicos: Utilizar dispositivos con un valor de reflectancia solar (SR) envejecida de al menos 0.28 o un SR inicial de al menos 0.33 si no se dispone de datos envejecidos.
- Estructuras vegetadas: Proveer sombra con estructuras cubiertas de vegetación.
- Materiales de pavimentación: Usar materiales con un SR envejecido de al menos 0.28 o un SR inicial de al menos 0.33.
- Sistemas de pavimento de rejilla abierta.
Opción 2: Aparcamiento cubierto
Este crédito permite obtener 1 punto. Para cumplir con el crédito, se debe cubrir al menos el 75% de los espacios de aparcamiento. Los techos deben tener un SRI envejecido de al menos 32 o un SRI inicial de al menos 39, ser vegetados o estar cubiertos por sistemas de generación de energía, como paneles solares.
Certificación VERDE
La Certificación VERDE también incluye un crédito dedicado a la reducción del efecto isla de calor, enfocado en estrategias que promuevan un entorno urbano más fresco y saludable. Se trata del crédito PE 08 Efecto Isla de Calor. Para cumplir con este crédito, los proyectos deben integrar superficies ajardinadas con al menos 5 cm de tierra vegetal, pavimentos permeables que permitan la absorción de agua, acabados de color claro que reflejen la radiación solar, y elementos de sombreado estratégicamente ubicados.
El proceso de evaluación implica calcular y documentar las áreas de parcela y cubierta que cumplen con estos requisitos, así como las fachadas este, sur y oeste tratadas para reducir la isla de calor. Es crucial proporcionar planos detallados, memorias de cálculo, detalles constructivos y estudios de soleamiento que justifiquen el cumplimiento de cada indicador.
Caso práctico de aplicación de medidas
Un ejemplo de estrategia de aplicación de medidas para la reducción del efecto isla de calor son las nuevas residencias de estudiantes de Grupo Moraval situadas en Vicálvaro y operadas desde setiembre de 2024 por Nodis.
En todas estas residencias, que optan a certificarse con LEED, se sigue la misma estrategia para asegurar no solo el cumplimiento del crédito mencionado anteriormente, sino también una reducción real del efecto isla de calor. En general, la estrategia se basa en la minimización de zonas pavimentadas, la maximización de zonas verdes y el uso de materiales de color claro en áreas como la cubierta.
Su estrategia se basa en los siguientes puntos:
- En planta baja, se minimiza al máximo la zona pavimentada. En las áreas que deben ser pavimentadas, se utilizan materiales con alto Índice de Reflectancia Solar (SRI) combinados con pavicésped. Toda la zona pavimentada cumple con el requisito de Non-Roof Measures, de las que hemos hablado anteriormente.
- Se maximizan las zonas verdes y se plantan especies autóctonas con bajas necesidades hídricas
- En planta baja se añaden paramentos con un SRI mayor a 33, lo que ayuda a reflejar la radiación solar y a reducir la acumulación de calor.
- En las cubiertas, se añade grava de color claro, lo que minimiza el efecto isla de calor debido a su alta reflectancia.
Estas medidas no solo contribuyen a la obtención de los créditos necesarios para la certificación LEED, sino que también mejoran significativamente el confort térmico y la sostenibilidad del entorno urbano.
En conclusión, el efecto isla de calor urbana es un desafío significativo que puede mitigarse mediante estrategias sostenibles promovidas por certificaciones sostenibles como LEED y VERDE. El uso de materiales de alta reflectancia, cubiertas verdes y la maximización de áreas verdes son esenciales para reducir este fenómeno.